Sendai Yuusha wa Inkyou Shitai


Capítulo 16: Incidente en el castillo del señor de los demonios (Despues)



Fecha de Publicación: 2019-06-24 11:52:30

Fecha de Actualización: 2019-06-24 11:52:30

Publicado por: drakaurs


Agniera: “Tonitrus, parece que hoy es el día en que quieres que te derriben, eh.”



Llamas salían desde el cuerpo de Agniera. El castillo del Señor de los Demonios, la Sala del Trono se vio envuelta en llamas en un instante.



Tonitrus: “No. No debes decir cosas que no puedes hacer, Flam”.



Comparado con eso, Tonitrus provocó sin expresión a Agniera.



Agniera: “Ahora sí que lo has dicho”.



Sus auras asesinas se enfrentaron.

Agniera con una alabarda de llamas, Tonitrus con una lanza revestida en relámpagos en la mano, ambos se apuntaron con las puntas de sus armas.

Agniera y Tonitrus se preparaban para ir por su presa y se enfrentaban.



Aginera: “Aquí voy, Tonitr──”



Llena de sed de sangre, Agniera estaba a punto de empezar a correr.

A su espalda, el relámpago “cayó”.



Tonitrus: “Aquí voy”



Murmurando esa frase, Tonitrus, quien había aparecido en la espalda de Agniera, lanzó su lanza de trueno.



Agniera: “…!!Rraahh!!”



Después de haber sido tomada por sorpresa, aunque chasqueó la lengua, Agniera levantó las comisuras de la boca y, junto con un grito, bajó la llama de la alabarda.



*¡¡Clang!!*



Un rugido atronador donde incluso sus vibraciones se podían sentir resonando en la Sala del Trono.



Tonitrus: “!……esplendido!”

Agniera: “La velocidad es mi campo de especialidad también”.



A pesar de obtener la ventaja de atacar por la espalda, la lanza de Tonitrus fue rota por la alabarda de Agniera.



Tonitrus: “En ese caso……”



La lanza rota hizo un *bachin* y se desvaneció en un momento, y al momento siguiente, una nueva lanza de trueno fue tomada por la mano de Tonitrus.



Agniera: “¿Quién de nosotros es superior...?”



*¡¡Bam!!*



Un destello, y luego un estruendoso rugido.



El empuje de la lanza de trueno que fue disparada con una velocidad que dejó atrás el sonido fácilmente excedió la velocidad de percepción de Agniera y atravesó su cuerpo, haciendo que el cuerpo de Agniera literalmente volara hacia atrás por el impacto.



Agniera: “Es lo que quieres decidir... ¿no es así?”



* ¡¡Boom!! *



Un viento abrasador que se sentía como fuer a quemar con solo tocarlo acarició suavemente la mejilla de Tonitrus.

En un instante, Agniera, quien debió haber sido arrastrada, lanzó un violento ataque desde la espalda de Tonitrus.

Agniera, siendo atravesada, era una ilusión que las llamas habían exhibido.



Tonitrus: “…… ¡Afirmativo!”



Habiendo estado sin expresión, las mejillas de Tonitrus se aflojaron levemente.

Cuando dobló la mitad de su cuerpo para evitar el ataque por el ancho de un cabello, en el momento en que se dio la vuelta, Tonitrus clavó el extremo de su lanza en la corona de la cabeza de Agniera.



Agniera “Algo así no me detendrá, ¡¡ORAH!!”



Habiendo alcanzado la frente de Agniera, resonó un sonido espeso.

Sin embargo, Agniera no se detuvo, cambió la alabarda que sostenía con ambas manos en llamas, puso eso en sus puños y lo golpeó.



Tonitrus: “!! ...... espléndido”.

Agniera: “¿Es eso todo lo que puedes decir, tú basado?



Tonitrus había creado una barrera mágica en un instante y se defendió contra las llamas, pero al ver que la barrera creada con premura no tenía suficiente poder defensivo, consiguió una gran quemadura en su estómago.

Incluso mientras recibían los ataques del otro, los ataques de Agniera y Tonitrus no se detuvieron, y la lanza y las llamas del trueno produjeron un gran daño a los alrededores.



Aquadine: “Por dios, seguro que pueden pelear mientras se ven como si estuvieran disfrutando”.



Borrando las llamas que estaban saltando literalmente con una barrera de agua, Aquadine dejó escapar un suspiro que sonaba asombrado.



Aquadine: “……Lo he decidido. Ese plan, hare que Flam participe también”.

Umbra: “Oya, ¿estás bien con eso?



Umbra recogió el murmullo de Aquadine.



Umbra: “No sé cómo se moverá ella, ¿no fuiste tú quien dijo eso?”

Aquadine: “Restringida al primer paso del plan, la personalidad de Flam será útil. Después de todo, actuar violentamente sin motivo es el objetivo”.



Con una risita, Aquadine se rio.



Umbra: “Ya veo... Bueno, entonces, esta vez será mi caballero negro y Flam, y Tonitrus-dono, ¿correcto?”

Aquadine: “Lleva algunos Demonios de bajo grado también”.

Aquadine: “A tu voluntad…… ¡¡Kihih, kihihihihi!!”



Haciendo un pequeño asentimiento, Umbra se hundió como si se fundiera en las sombras junto con una risa espeluznante, y borró su apariencia.

La figura del caballero negro que Umbra había traído también desapareció repentinamente.



Aquadine: (Ese maldito Umbra…… No alcanza el nivel de Flam, pero es increíble que haya estado preparando un peón en el nivel de alguien de la clase Duque…… Podría estar cerca el momento en que es mejor deshacerse de él).



Aquadine albergó un estremecimiento por el caballero negro que se había defendido contra el ataque de Agniera.



Aunque solo vislumbró su apariencia y un fragmento de su poder, comprendió cuán altas eran las habilidades de ese caballero negro. Después de todo, esa armadura negra se había defendido y detuvo el golpe de Agniera que rivalizaba con el demonio de clase Duque más rápido, Tonitrus.



Para los demonios, aquellos de la clase Duque son existencias con una fuerza absoluta que están fuera del sentido común.

Incluso los Demonios ordinarios poseían habilidades que superaban a las de los humanos, y vivieron por una eternidad de tiempo.

Entre tales criaturas, los de clase Duque son existencias consideradas como monstruos, son temidas y estaban en la cima.



A pesar de eso, ese caballero negro mostró la capacidad de simplemente detener el ataque de Agniera, uno de los mejores de la clase Duque.

Ese ataque que dejó atrás el sonido y poseía una velocidad como si fuera un destello brillante, se había defendido de él y lo había detenido.



Aquadine: (No, hasta que el Señor de los demonios haya revivido, haré uso efectivo de él... Ambos Umbra y ese caballero negro.)



Todavía eran útiles.

Cuando ella pensó eso, la preocupación de Aquadine se trasladó a Agniera y Tonitrus.



Agniera: “Oraoraorarararaaahhh!!”

Tonitrus: “Esplendido... ¡Sin embargo, sigue siendo lento...!”



Las puntas de la lanza y la alabarda chocaban. Sus poderes produjeron un rebote, haciendo que sus armas especializadas se repelieran. Fijaron sus posturas con una velocidad monstruosa, y una vez que lo hicieron, lanzaron un golpe de muerte instantánea. Pero, ese ataque una vez más chocó.

Las puntas se hicieron borrosas, el impacto sacudió la atmósfera y las armas continuaron.



Aquadine: “Ahora bien, ¿cómo deberían detenerse estos dos?”



Aquadine dejó escapar un pequeño suspiro.


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